Ladrillo de Canto
Patricio Lanusse: Hola Chaile…para empezar quisiera preguntarte algo que aparentemente no tiene que ver con tu trabajo pero creo que es importante. Quisiera que me cuentes porque tenes rulos afro siendo que sos descendiente de comunidades del norte argentino…y esas comunidades tienen como rasgo distintivo el pelo lacio y duro, por eso me llama la atención y me gustaría entender. Eso por un lado…y por otro quisiera que me cuentes cuál es tu relación con la religión, puntualmente con las prácticas protestantes.
Gabriel Chaile: Hola Patricio…mira es rara la combinación que hay en mi familia y hasta confusa porque hay cosas que no se saben y muchos datos perdidos. Mi abuela paterna venia de Brasil y tenía el pelo afro -no tenía piel negra pero si era morocha-y mi abuelo aborigen tenia el pelo muy lacio y cabudo -cabudo se dice en Tucumán para referirse a los pelos duros, lacios y parados-.
Es una cosa extraña esto que me preguntas porque es un tema recurrente en mi familia: hablar de dónde venían los antepasados…hablar de que hacían y que forma tenían. Nos gustaba decirnos a quien nos parecíamos, también había una negación en un momento a ser o tener sangre aborigen o con el mismo pelo afro. Me acuerdo de mi hermana renegando de su pelo o yo mismo cortándomelo muy bajo toda la secundaria o mi hermano que tiene rasgos más aborígenes que los míos -pómulos muy prominentes- negándolos. Hoy creo que estamos más conscientes de esos lugares de pertenencias, entender ese cruce como una riqueza de la forma. Pero era difícil me acuerdo…
También había algo particular con el pelo; mi padre nos cortaba el pelo a todos -y después nos cortaba mi hermana- así que nunca íbamos a la peluquería. A mí siempre me llamaron la atención las peluquerías, creo que porque no las conocía. Me divertía ver que alguien te cambie un poco tocándote la cabeza, aunque odiaba que me corten el pelo, también pensaba en la historia de Sansón. Recién de muy grande fui a la peluquería y hoy me divierte hacerlo.
Respecto a lo protestante, recién te decía que me gustaba la historia de Sansón. Siempre fui fan de los héroes de la fe, los que más me gustan son rebeldes como Jonás que le dicen que se vaya a Nínive y se iba exactamente para el lado contrario, o Salomón.
Mi madre se hizo protestante en la época de la dictadura en Tucumán, nos contaba que se reunían a escondidas en la ciudad de Tafi Viejo donde desaparecieron a muchas personas. EN ese momento ellos -mis padres- estaban buscando una religión y probaron varias, siempre por el lado del protestantismo, y se hicieron adventista del séptimo día, que es la religión con la que me crie. Los adventistas -a quienes admiro un montón- siempre se preparan, estudian, discuten, se congregan, vuelven a estudiar y se vuelven a preguntar una y otra vez sobre los grandes temas de la biblia. Me gusta ese afán por conocer la biblia, tienen un sentido del compañerismo que es hermoso y como toda comunidad humana también tiene sus problemas pero lo saben llevar.
Ese imaginario sin imágenes en el que me crie me formo mucho y aun hoy me atraviesa. La biblia es el libro que más leí…e imagine. Digo imagine porque no tenía imágenes o ilustraciones; de hecho los protestantes se le parecen a la idea del cubo blanco de los museos…ósea están vacíos de imagen. Los adventistas ven en el apocalipsis esperanza y se preparan para él; es decir saben llevar la situación límite.
PL: No sé si sabias…pero Grela tenía una peluquería y con eso se mantenía económicamente y muchos de sus alumnos terminaron en Tucumán Arde. Pensando en esto y en la historia de Sanson se podría hacer una genealogía del pelo y del poder…
Por otra parte…tengo la impresión que ciertas cuestiones formales de las religiones van desapareciendo, pero las formas de procesar la información permanecen. Se ve ahora con el tema del debate del aborto que los que están “por las dos vidas” usan argumentos religiosos pero lavados de dogma…y aunque parezcan argumentos laicos tienen un fuerte sustrato católico. Por eso me parece muy importante tu relación con la biblia y el protestantismo…más allá de si seas o no practicante.
En ese sentido creo que el protestantismo imprime un modo de estar en la realidad muy distinto al de los católicos. En el protestantismo la biblia está abierta a interpretación de quien la lee, se pone en discusión…en cambio en el catolicismo la interpretación baja de la figura de autoridad (un cura, el papa, etc.). En ese sentido me parece que hay una línea bastante directa entre Lutero cuando dice que todo hombre es un exegeta y que llega hasta Beuys cuando dice que todo hombre es un artista. En ambos casos se coloca sobre el sujeto la autoridad que da el sentido; un determinado sentido…no hay un afuera/autoridad que legitime o habilite o no una interpretación. Y en ese sentido son formas o matrices emancipatorias del sujeto frente a los otros y el entorno que lo rodea.
GC: No sabía el dato de Grela, me encanto!!
Lutero y Beuys como vos bien decís plantean estas dos frases que son increíbles porque abren el juego para pensar el campo de una manera distinta y por lo tanto están ahí ofreciendo una nueva posibilidad. No me resulta para nada extraño que Beuys haya nacido en un país protestante, me acuerdo cuando estudiaba el barroco católico y el barroco protestante (Rembrandt vs Rubens) hablábamos del origen del capitalismo y en cómo se presenta la forma en función de un dogma que los atraviesa a todos, incluso a aquel que no cree en ese dogma.
Respecto al uso de las imágenes entre los protestantes te cuento que las imágenes no están prohibidas…solo que no se las consume en tanto objeto de culto. No hay culto a la personalidad en imagen: de un dios, de un cristo, de una virgen, de un santo etc. Por eso las iglesias están vacías de imágenes, pero si tienen una imagen y esto es algo que me parece de lo más maravilloso…al menos de los adventistas que es lo que más conozco. Los adventistas tienen oculta una imagen en lo que sería el bautisterio. Está detrás del pulpito y cubierta con cortinas rojas, atrás de eso hay una especie de pileta escenográfica que tiene la única imagen representada: un paisaje pintado. Allí se coloca agua, es decir se llena la pileta con agua y el agua se funde con esa pintura de fondo generando un clima. Esas cortinas se abren en ocasiones muy especiales -cuando un adulto decide bautizarse- y esa persona ingresa a esa pileta-paisaje vestida de blanco para ser bautizada y todos desde sus asientos miran esa imagen. Este lugar además de ser el bautisterio se le llama lugar santísimo porque se mantiene todo el tiempo cerrado, nadie puede entrar ni verlo porque solo se lo usa en ocasiones muy especiales. Es decir que la única imagen que tienen solo se la ve una vez cada tanto y además la persona es actor principal de esa imagen, porque solo funciona y la vemos si alguien decide bautizarse.
Esos actos me fascinaban, tanto que no podía esperar los tiempos para que se abran las cortinas así que muchas veces a escondidas me metía en el bautisterio a tocar esas pinturas. Quería saber cómo estaban hechas y me gustaba ver desde adentro de las cortinas.
Acá aparece algo que los protestantes le llaman el testimonio: que es la imagen que cada persona produce en relación a otros…que imagen produzco yo en el otro. Es decir todo el tiempo se preguntan por la imagen que producen los actos de uno mismo sobre los otros; de eso básicamente se trata la vida protestante.
En cuanto a esta última muestra “cosas que ojo no vio” es un fragmento de un texto de Pablo a los Corintios, habla del misterio visual y sonoro que va a venir, que se está preparado pero que nadie conoce. Yo hice esa forma y en principio quería que parezca la Meca y a la vez una casita de canto; frágil y fuerte a la vez…simétrica, pesada, poderosa y cálida; como un Dios. Arme un sistema de puntos para que se pueda establecer una interpretación; quizás como las de las constelaciones o el mismo sistema Braille. Les decía a los chicos que me ayudaron a hacer los agujeros en los ladrillos que pensemos en un texto para alguien; colocábamos siete puntos en cada ladrillo de manera distinta en base a una matriz. Ese texto se desdibuja en la medida que hacíamos muchos…y mucho más cuando cuando unimos las partes. Entonces es un misterio, incluso para nosotros que los hicimos…ahí hay algo pero no sé qué es. Ese misterio en la forma lo quiero para mí, y me pasa que lo encuentro en el arte y la religión.
PL: Me impresiona que no hablas de la vista en relación a la imagen…hablas del sentido del tacto cuando hablas del bautisterio. Que te metías a escondidas para “tocar las imágenes”; parece una cosa casi libidinal…como si la vista no alcanzara para aprehender la imagen, hace falta tocarla.
Quería volver a la cuestión del testimonio. Me interesa esta cuestión de tu religión por que tiene el pie puesto no sobre “la verdad”, sino sobre la representación…me interesa ponerlo en relación a eso último que hablas del misterio.
Lo voy a explicar así…una imagen puede ser misterio, pero el hacedor de esa imagen no queda capturado por que entiende la maquina ficcional. Él arma la representación y es consciente de cómo opera esa maquinaria; por eso siento que hay una imposibilidad en esto que decís. Como si la búsqueda del misterio fuera una imposibilidad, por lo menos para vos que lo estás construyendo…por eso no me queda claro.
GC: Respecto al misterio se me vienen dos imágenes para tratar de explicar que pasa con eso y porque lo quiero para mí. En primer lugar lo veo como la obra de Francis Alys que hizo en Argentina, la del espejismo… perseguir algo que nunca alcanza pero que lo ve, está ahí, pero no llega y al mismo tiempo hace un recorrido, viaja en una ruta y en el viaje -supongo- encuentra cosas. La otra imagen que se me viene a la cabeza es la imagen bíblica de Job hablando con el torbellino. Job esta tirado, muy destruido por todas las desgracias que le sucedieron y hace preguntas existenciales desde ese lugar; entonces aparece el torbellino o dios en forma de torbellino y empiezan a charlar con preguntas. Siempre me imagine a Job entrando en el centro del torbellino, como si sus preguntas buscaran algo de ese torbellino.
Lo que quiero decir es que el misterio -al menos en el que yo intento detenerme- tiene unos márgenes, como esa ruta, y para abordar eso no me alcanza con la razón porque la razón es muy plana para abordar esos campos, entonces apelo a lo metafísico también…a la fe en las cosas por eso te hablada del arte y la religión. Es importante la razón pero no lo es todo para tratar de meterme en eso que yo llamo misterio y que es lo que me hace seguir buscando formas.
No sé si se entiende lo que quiero decir; a esa intuición yo lo relaciono con el misterio que uno persigue y no sabe muy bien porque…pero lo ves y queres meter mano en ese lugar.
PL: Me llama la atención que vuelvas a usar una analogía táctil para la cuestión del misterio…decís que queres meter la mano en ese lugar, como si la dimensión real de la imagen fuera táctil y no visual.
En relación a esas imágenes de Allys y de Job creo que la buena noticia es que podes simplificarlas en una sola…Allys tiene una obra en la que él mismo se mete dentro de unos tornados…está en un descampado donde hay unos torbellinos fuertes pero no mortales y él va corriendo y se mete adentro del tornado.
Creo que Peralta Ramos tiene un texto donde dice que a medida que crecemos vamos siendo cada vez más coso…y con el tiempo terminamos siendo un coso que le habla a otro coso y se arma una especie de abismo entre cosos que se hablan pero no pueden comunicarse. Quizás eso sea el misterio que decís…perderse en una búsqueda interna y coso-ficarse. Escuche también alguna vez que Platón no quería a los artistas por que atentaban contra el proyecto colectivo que necesita una Republica…y quizás tenga que ver con esa pérdida interna en la propia cosedad a la que estamos lanzados -como personas y como artistas-.
GC: Esto que decís del coso, los artistas y Platón…pienso en la imagen de un volcán por ejemplo…todas las montañas son potencialmente un volcán pero pocas son volcanes realmente. Sin embargo lo que expulsa el volcán es compartido por todas las montañas pero solo el volcán está encargado de hacer ese trabajo…el de sacar afuera la lava. De este modo pienso que adentrarse en ese misterio no nos aleja de la comunicación con la otredad -o con la idea de Republica-…creo que nos acerca muy intensamente por que todos estamos ahí…buceando sobre ese mismo “algo caliente” y es necesario que algunos supuren a ese algo.
PL: Más arriba dijiste que cuando hiciste la obra para Tres Pinos pensabas al mismo tiempo en la Meca y en una casita de canto…me gustaría si pudieras explicar que es una casita de canto.
GC: La casa de canto es cuando se ubica el ladrillo no acostado sino que se pone de canto. Es una manera muy precaria de construir…es frágil pero cubrís mucha superficie con muy poco. No queda mal pero es una construcción blanda, se usa mucho en la pobreza…es como la cascara de un huevo.