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  • Valeria López Muñoz

Arte de transformación






Vamos a jugar a los animales

Vamos a jugar a los animales

Vamos a escucharlos, tú y yo

(chiquitines TV)



El olor a pelo que había en la casa no me daba asco,

al contrario, ese olor a pelo para mí significaba libertad.

(El principio, Ana Inés López)



El viernes pasado fui a la apertura de Oink, la actual muestra de Bart Network y Mia Superstar en El Dije. Simplemente me dejé llevar por la invitación de lxs artistas a ver una presentación de sus “nuevas cochinadas”. Un plan perfecto para este atardecer frío, pensé. Pero antes de hablar de la muestra me gustaría decir algunas palabras sobre el espacio. A mí me encanta ir al Dije porque queda muy cerca de mi casa, es uno de los pocos lugares de arte contemporáneo que hay en el barrio de Monserrat y además está dirigido por dos chicas (estoy tentada a decir espacio lesbiano pero no sé si a Lola Granillo y a Marina Daiez, fundadoras de El Dije, les gustaría una categoría así). Para llegar a la muestra tuve que pasar por la casa de Lola, es decir, El Dije queda en su casa. Primero tuve que subir una escalera larga y pasar por una especie de pasillo, después tuve que atravesar el living y ahí recién vi aparecer la salita-habitación de muestras. A su vez todo eso que cuento es El Dije, ya que las personas y un poco también las obras y las bebidas andan esparcidas por todos lados. Entonces sentí algo distinto que ir a un lugar únicamente como espectadora, en realidad esa tarde me sentí más ocupa o huésped que espectadora. Hasta había una picada para resolver la cena. Y antes que me olvide: también está la tiendita al cuidado de Dai Rose donde se pueden comprar bombachas, arneses, bijouterie, cuadernos, obras de pequeño formato y los libros de la Editorial El Dije, entre otras cosas a precios accesibles.


De la casa me llamó la atención la cantidad de madera que hallé, tanto en la arquitectura y el mobiliario como en la montaña de leña de donde se alimenta la estufa central que calefacciona el ambiente. Este detalle relacionado a la temperatura no es menor cuando se trata de una muestra realizada a principios de agosto, en invierno todavía, en una ciudad particularmente húmeda donde el calor se agradece. Definitivamente esa estufa a leña es el corazón de la casa, y de esta manera la muestra de Mia y Bart deviene también en órgano integrante de ese cuerpo, pero tendría que ser un órgano importante, que a su vez se componga de dos partes que trabajen indefectiblemente juntas para andar, como un par de pulmones.


Suspiro solo un ratito más en esta analogía anatómica para agregar, ya dentro de la sala, que las costillas-paredes que protegen los pulmones-muestra no son huesos blancos como unx se podría imaginar, sino que están muy bien coloreadas. O pintadas, es lo mismo. Puede ser que colorear tenga más que ver con dibujar, y esto me lleva directo a una idea de Mia Superstar expresada en un dibujo que no está en la muestra pero es como si estuviera: “Los dibujos también somos pinturas”. Me parece que toda la muestra se identifica con esta canción: algo así como ¡los silloncitos de cuerina también somos pinturas! ¡los crochets también somos pinturas! ¡las extensiones de pelo también somos pinturas! Pero el silloncito, los crochets y las extensiones de pelo no dicen esto con palabras. En esta muestra la única palabra posible es Oink y no hay texto curatorial. No hay palabras y casi que no hay rastros de humanidad.


A veces pasa que cuando aparece una miguita de realidad humana en medio de otras cosas no humanas, ahí sucede algo extraño, como ser encontrar un pelo en un budín, o una gotita de sangre en una baldosa, o una huella roja de labial en un vaso. O algo parecido puede ser cuando te mudás a una casa nueva y lxs inquilinxs anteriores dejaron la heladera con todos los imanes y calcomanías pegados. Algo así sentí en la muestra frente a dos muñecxs con pelo de verdad y ropa de bebé. Y el hecho de tener que verlxs muy de cerca, porque la sala es chiquita, tendrá unos tres metros cuadrados, contando la parte del balcón, hizo que se acentúe aún más esta sensación casi siniestra, que es solo una forma posible de sentir. Sin embargo es una muestra hecha por humanxs, y me animo a llamarlxs tiernxs humanxs, cada obra que hay en la salita pasó por las cabezas, corazones y manos humanas entrelazadas de Bart y Mia, y mientras hacían todo, para estimularse, comían helado.


Hay algo que es bastante claro. La muestra es una pintura y una pintura es la muestra. Una pintura que desafía las leyes de la gravedad, como una casa fantasma en la ciudad de Córdoba donde suelen ir de viaje lxs egresadxs, cuya estructura inclinada hace que todo lo demás parezca a punto de caerse.


También es central la premisa de transformación.


El arte de transformación tiene que ver con una demostración visual por etapas de un cambio en las cualidades físicas de unx personaje. Esto puede ser de humane a humane, de humane a animal, de animal a cosa, de humane a animal-cosa-humane, y así infinidad de variantes que se pueden ver con total claridad en una imagen. El arte de transformación, dicho de esta manera, tiene que ver con el fan art de deviantart.com, pero también se parece a los dibujos a plumín de la artista santafesina Mele Bruniard. Un ejemplo del arte de transformación de Mele Bruniard son las combinatorias de pato, flor, tallo, tallo flor, tribal, flor pato, pato flor, flor tribal y corazón. Ahora, para ofrecer una idea del arte de transformación de Mia y Bart, hice una listita de algunos mundos transformados que pude recopilar en su muestra:


mundo muñecxs y dibujitos

mundo animal y de insectos

mundo del mueble, la decoración y los electrodomésticos

mundo de internet

mundo vegetal y de biomas

mundo del color, la temperatura y la luz


Así como en tiempos lejanos artistas como Kandinsky y Paul Klee se obsesionaron con el arte campesino o el arte forastero buscando una fuente de inspiración en los márgenes de la convencionalidad del arte de su época, Mia y Bart buscan estímulos artísticos en el fan art de deviantart. También en otras cosas como "la globología, el pop rock, My Little Pony, un videoclip de Los Redondos de PutiClub, el Puto mundo en general, los 2000, los duendes de Bariloche, la música que parece compuesta por ratitas, las burbujas, las albóndigays, las pelotaz y los globos, en fin el redondismo(?), el hyperpop, Peiyue, las muñecas Groovy Girls, los souvenires (muñecxs que coleccionamos), el paisajismo diverso, el cringe, el hentai, el helado, el vino, la lechuga, nuestra anterior muestra y todo lo que sea parecido a un almohadón". Muchas veces invitando a participar de todo esto a sus yoes niñes. A Mia una vez le preguntaron en catequesis qué era lo que más le gustaba hacer y ella respondió la risa, hacer reír. Esto me dio pie para preguntarle también a Bart qué es lo que más le gustaba hacer de niño, a lo que él respondió: “A qué te refieres con niño? Acá nadie dejó de serlo (jijiji risas). También algo de viejxs somos todes. Pero siento que muchas de las cosas que hacía y me gustaban hace mucho tiempo siguen vigentes o transformadas. Principalmente la habilidad de jugar.”


Junto a esta mini entrevista, para terminar, voy a contar una pequeña hazaña. Antes de salir para la muestra yo estaba leyendo mi libro nuevo de Walter Benjamin llamado La tarea del crítico. Es un libro viejo, pero lo conseguí recién ahora y en realidad solo llegué a leer la introducción. Ahí, entre otras cosas, dice que la verdadera crítica es la crítica aniquiladora. Cuando llegué a El Dije comenté esto con algunas personas que me siguieron el juego. Entonces nos pusimos a hacer crítica aniquiladora en la muestra de Mia Superstar y Bart Network, pero no nos salió. O sea sí, por ejemplo, encontramos un pelo suelto en un marco y dijimos: ¡inaceptable!, una manchita de azul en la pared que debía ser toda naranja: ¡vergonzoso!, la pintura principal un poco torcida pero que nadie se dio cuenta y es más, se vendió al instante. Ahora pienso en esas impurezas que podrían incomodar a más de unx señoritx y las veo como una propiedad, como un encanto mágico de las obras que las hace más líricas y poderosas. Pienso también que no sé cómo se hace la verdadera crítica aniquiladora y que Oink es una muestra hermosa que nos hace mejores a todes.



Sobre Oink de Bart Network y Mia Superstar en El Dije (México 1272, Monserrat)

Próximas aperturas jueves 5 y viernes 6 de agosto





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