top of page
  • Ayelén Agüero

Hay un cuarto en el bolsillo



Me convertí en señora tratando de reprogramar lo que no se me es dado. Le di mil vueltas a discursos repetitivos, situaciones que parecen no tener crédito. Todo especulación.

¿Qué le pasa a la incertidumbre que le hace añicos a estos revestimientos? ¿A dónde deberían volar las aves? ¿Fui precoz a los rasguños innecesarios sentimentales de alguna emoción que quise y se esfumó rápido? ¿Con cuántos desconocidos hablo por día ?


Me encanta hablar, hablo de a ratos, calladita, cada silencio es un honor para mi.

¿Controlar el poder de los otros? ¿Sentir de a ratitos miedo? Seguía divagando el desconocido por la web.

El otro día me encontré con un embotellamiento de móviles, sutiles, situados a mi altura. Quise corregir unas de las piezas, y toque un botón timbre pezón blanco que me chillo, al mismo tiempo sonó otro. Lo toco Agus, ambas reímos, nos pareció tan chistoso, pero a mi me removió justo unos sonidos que me había mostrado días atrás un amigue. Eran los sonidos de grillito de humedal. Volvimos al silencio, pero los móviles seguían en movimiento. Todo me parecía como notas esparcidas en sutilezas rígidas. Chiyona sus colores, no me gusta lo chillón pero si todo lo que refiera el estado mutuo de alegría. Nos encontrábamos en un lugar, luego por el otro, dábamos vueltas a través de las piezas mientras esquivaba nos de a ratos. Disculpen amigos si entro en cortocircuitos, fue hasta antes de ayer que percate bien lo que mis ojos habían visto. También hablamos de aquellos pianos que una vez aparecieron arriba de una lancha, no se bien si era por el Carapachay o Sarmiento, pero que eran varios músicos y me revivió aquella radio que una vez fuimos y tenía miedo de caerme por el caminito fino arriba de los yuyos. Volviendo a la obra de Cecilia, que lindo nos hizo sentir, asi de vuelta niñas jugando en reposo de detalles figurativos, los blancos, amarillos y rojos. Al rato también nos reímos de no saber muy bien qué pasará y justo el otro día volví a caer en Alvin toffler con el shock del futuro. Todo tan siniestro.

Caigo sin darme cuenta que eso le juega a mi energía tan alterada por momentos.


No repulsiva otra vez no

no repulsiva otra vez no


(sonaban los timbres)


no repulsiva otra vez no

no repulsiva otra vez no


(sonaban los timbres)


eso es un insulto, jamás podría perdonarme


mas que impulsiva, no

más que impulsiva, no


(palmas)


más que impulsiva, no

más que impulsiva, no


(palmas)


que, ya lo arañaste todo?

Codificaste todo esto?

Mejor descansar , la cabeza recibe mucha información

Mis ojos leen cada vez más lento



Sobre Mente Infinita de Cecilia Biagini en Para Vos Norma Mía



RECENT POST
bottom of page