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Lucia Reissig

Colectivos Sustentables


Es 2030 y vuelven los colectivos artísticos, se ponen de moda porque nos dimos cuenta que es mucho mejor, más divertido y menos trabajo. Las obras individuales continúan pero toman un lugar secundario porque no es tan sustentable, la mayoría prefiere trabajar en los colectivos, que además son cooperativas. También son muy populares los festivales en las plazas, llevamos las obras ahí por el día, comemos, vemos performances y hacemos asambleas.


En todos los talleres y actividades del mundo del arte está permitido y se fomenta la presencia de hijes, abueles y mascotas, por ejemplo perros ya que les gusta salir y estar con humanes. Así aprendemos de la ternura y la interdependencia. De hecho, hace unos años empezamos a experimentar la idea de tenencia compartida, se adopta entre 3, 4 personas o a veces se suman xadres a familias ya conformadas, esto no se reduce solo a niñes, sino también adultes, animales, etc. generando familias expandidas.


La situación de vivienda se vuelve, al fin, mucho más digna ya que realizamos una investigación sobre departamentos vacíos, herencias, precios de obras, viviendas propias, etc y conseguimos una forma de redistribuir la riqueza entre colegas, galeristas y coleccionistas. También logramos que se apruebe y entre en vigencia automática el proyecto de ley donde sumamos la categoría de artista en la AFIP y finalmente tenemos obra social y jubilación además de algunos descuentos muy copados en verdulerías y supermercados.


Las residencias como las conocíamos antes, esas que había que pedir 3 becas y aplicar en inglés, dejar pago el alquiler o subalquilarlo, bancarse no generar ingresos durante ese tiempo que te ausentas o renunciar y pedirle a alguien que cuide de tus animales de compañía y plantas, esas ya no existen. Lo que existe son retiros autogestionados por la misma comunidad artística (como dije antes, pueden acompañarte tus personas significativas y animales). Dos veces al año, en abril y septiembre que está tan lindo el clima, se llevan a cabo estas Nuevas Residencias en las casas de quienes tengan propiedades en algún lugar natural, va rotando en cada edición. El intercambio es ofrecido por la comunidad artística pero puede venir quien quiera y entre todes nos enseñamos algo, aprovechamos la ocasión para cruzar disciplinas o probar algún experimento para nuestras obras. Como ir a buscar hongos la mañana después de una gran tormenta, clase magistral para aprender a medir el PBI, tutorial de twerk, canastas tejidas, etc. Entre todes se reparten las tareas de cuidado, se descansa bien, gozamos del ocio, nadamos de noche, hacemos fogones y fiestas orgiásticas para reforzar el vínculo comunitario (quienes tengan ganas, claro).


Jaja ahora vemos para atrás y nos reímos de lo raro y complicado que era todo antes del 2030.

Esta nota forma parte de la edición especial ARTISTAS 2030 y es una respuesta a la siguiente pregunta: Es el año 2030 y sos artista podrías contarme un poco de que se trata?

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